<p><a href=»https://www.elmundo.es/espana/yolanda-diaz.html»>Yolanda Díaz</a> se ha desatado con vehemencia contra el <a href=»https://www.elmundo.es/e/pp/pp-partido-popular.html»>PP</a> y ha acusado a su líder, <a href=»https://www.elmundo.es/e/al/alberto-nunez-feijoo.html»>Alberto Núñez Feijóo</a>, de estar «hackeando las instituciones» por dar plantón al acto de <a href=»https://www.elmundo.es/espana/2025/09/04/68b9c3cffdddff032f8b45a8.html»>apertura del Año Judicial</a> que este viernes se celebra en el Tribunal Supremo. «Lo peor es que no sabe que trabaja para <strong>Vox</strong>», ha aguijoneado la líder de Sumar.</p>
Sobre la reducción de jornada: «Las causas que están ganadas en la calle, siempre se acaban ganando»
Yolanda Díaz se ha desatado con vehemencia contra el PP y ha acusado a su líder, Alberto Núñez Feijóo, de estar «hackeando las instituciones» por dar plantón al acto de apertura del Año Judicial que este viernes se celebra en el Tribunal Supremo. «Lo peor es que no sabe que trabaja para Vox«, ha aguijoneado la líder de Sumar.
La andanada de la vicepresidenta segunda del Gobierno hurga en la deliberada ausencia de Feijóo en este acto solemne del Poder Judicial por que en éste participará el fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, que se encuentra al borde del banquillo de los acusados por varios delitos pero que se aferra al cargo y se niega a dimitir.
En una entrevista en Las Mañanas de RNE, Díaz ha pintado al PP como un «partido antisistema» que se encuentra embarcado en una estrategia de «destrozarlo absolutamente todo», imitando el comportamiento «de la extrema derecha en el mundo», «desde Trump a Milei».
Para Díaz, Feijóo «ha traspasado una barrera de la que tiene muy difícil salir» en la que está «dispuesto a todo», envolviéndose «sin rubor» en «la estrategia de la extrema derecha». Con esa posición de secuestro de Vox no va a llegar a La Moncloa», ha avisado.
La vicepresidenta segunda del Gobierno ha considerado que Feijóo está «golpeando» a los miles de profesionales de la Justicia y, lo que es más grave, está en la «quiebra de la institucionalidad». «El PP está en romper absolutamente todo, ruido, desagravio, la nada», ha dicho, su único programa de gobierno es tumbar al Gobierno de España».
Díaz ha apoyado sus acusaciones en que Feijóo se ausenta del acto, pero también en que ha pedido que el ministro de Justicia, Félix Bolaños, no ejerza sus funciones y renuncie a ir. De igual modo, ha alertado de que esa quiebra de la institucionalidad está también detrás de que el PP exija a sus presidentes autonómicos que no acepten la quita de la deuda o de que éstos se rebelen contra la Ley de Vivienda y se niegan a aplicarla. «Si yo hiciera esto estaría en un banquillo», ha rematado.
Cuestionada si entonces cree que el PP es un partido antisistema, Díaz ha respondido que no tiene «ninguna duda».
En cuanto a las críticas del Gobierno a los jueces por tomar decisiones políticas para dañar sus intereses, Díaz las ha sostenido cuando ha señalado que es «verdad» que hay jueces y juezas «cuyas conductas son irregulares y manifiestan injerencia política». Ahí lo ha dejado.
Una explicación a la dureza de Díaz contra el PP es que este partido se ha cerrado en banda a apoyar o permitir la aprobación de la reducción de la jornada laboral a 37 horas y media. Sus votos, sumados a los de Vox y Junts, pueden hacer caer la medida estrella de Díaz el próximo miércoles en el Congreso. La vicepresidenta está señalando a los populares como los culpables de si se trunca la propuesta mientras trata con guante de seda a Junts en medio de los últimos intentos por intentar convencerle.
Sobre la reducción de jornada y el estado de esa negociación, Díaz no ha aportado novedades. Insiste en que sigue «trabajando» pero no parece haber acercamientos. Eso sí, ha dejado un mensaje para el futuro: «Las causas que están ganadas socialmente siempre se acaban ganando». Esto hila con lo que dijo hace unos días de que si fracasa al votación y el proyecto muere, lo volverá a presentar. Su tesis es que es una medida que «está ganada en la calle».
Vinculado a esto, ha recriminado al PP que vaya a darle una «bofetada a los trabajadores» en su empeño por «la destrucción de este país».
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