<p>Acabado el fin de semana con dos victorias, la brava ante Bosnia y la lógica contra Chipre, España se dio por clasificada para octavos de final, el objetivo de mínimos, viajar a Riga. Incluso con el escenario de dos derrotas contra los dos favoritos del grupo, Italia y Grecia, como así fue. Si la lógica se cumplía… Pero la lógica se hizo añicos el martes, cuando <strong>Giannis Antetokounmpo</strong>, un pequeño dolor en su rodilla, con los Bucks al acecho, decidió tomarse el día libre ante Bosnia, que no lo desaprovechó. En ese momento todas las matemáticas se endemoniaron para ponerse en contra de la selección. </p>
Los hermanos, capitanes, ambos los más señalados en la derrota por su bajo rendimiento en el torneo, dan la cara: «Asumo la culpa. No he estado a la altura»
Acabado el fin de semana con dos victorias, la brava ante Bosnia y la lógica contra Chipre, España se dio por clasificada para octavos de final, el objetivo de mínimos, viajar a Riga. Incluso con el escenario de dos derrotas contra los dos favoritos del grupo, Italia y Grecia, como así fue. Si la lógica se cumplía… Pero la lógica se hizo añicos el martes, cuando Giannis Antetokounmpo, un pequeño dolor en su rodilla, con los Bucks al acecho, decidió tomarse el día libre ante Bosnia, que no lo desaprovechó. En ese momento todas las matemáticas se endemoniaron para ponerse en contra de la selección.
Que lucho con orgullo ante dos equipos con más estrellas y experiencia. Lo hizo a pesar de que las suyas propias se apagaron. Especialmente señalados del fracaso en el Eurobasket escapan los hermanos Hernangómez, los dos novedosos capitanes. Juancho se quedó a cero ante Italia, el día que Willy sólo metió un tiro libre. En la ‘final’ contra Grecia, el pívot se fue con seis puntos y tres rebotes y también con cuatro tiros libres fallados. El alero del Panathinaikos, también la nada: cinco puntos y un rebote.
Pero Juancho no puso tiritas en la zona mixta. Su autocrítica fue dura. Hasta erró tres tiros libres finales cuando ya España se agarraba a imposibles. «He cometido muchos errores. Esta es la cara dura del deporte. Asumo la culpa de lo que ha pasado en este campeonato. No he estado a la altura. Es un fracaso», pronunció. Y apuntó a los «errores del final». «Tengo que meter algún puto tiro libre. Así es deporte y su cara amarga», reincidió en zona mixta. «Ha faltado un poco de todo. El baloncesto es bastante justo. No lo hemos preparado bien. No hemos estado».
Willy también dio la cara, por partida doble. Paró en la zona mixta y acudió a la sala de prensa, donde aplaudió al seleccionador que le hizo MVP del anterior Eurobasket, el técnico que mejor ha sabido hacerle jugar. No esta vez. «Es muy duro, estoy seguro de que esto va a ser una experiencia de cara al futuro. Esto duele, pero nos va a hacer más fuertes. Teníamos la ilusión de estar en Riga, pero no ha sido suficiente», reflexionó el mayor de los hermanos, pronto de vuelta a la disciplina del Barça, donde le resta un año de contrato.
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